"La comida suele ser bastante aceptable en apariencia,últimamente han subido bastante los precios de la carta,resultando más caro y poco saciante su comida.Es bastante más caro para 2 personas,que comer un buen menú español en una media de 10 Euros por persona. Inconvenientes: descubrimos que friegan los vasos en la barra del local a mano y en un mismo agua de un barreño (los guarrean y secan). Las rápidas aceitunas de aperitivo que te traen,antes de sentarte en la mesa,las reciclan en lugar de tirarlas,es decir las que no me coma yo,las comerá usted. El dueño es bastante prepotente y algunas veces cuando discuten entre ellos,es incomodo estar cenando allí. Los repartidores de comida pasan por delante de tu mesa a la cocina perjudicando la tranquilidad de la cena. También les puedes ver en la puerta de la cocina que da a la calle,fumar y manipular comida.(nosotros no volvemos jamás) y era un lugar que nis gustaba,pero hay cosas que son inaceptables y de cerdos(pero sin salsa agridulce).Cerdos,cerdos..."