"Después de leer todo lo bueno que había leído por aquí, esperaba una grata experiencia, y por contra, me he llevado una buena decepción. Con una mesa reservada, nos sentamos justo a la hora convenida, las 14:00h. No hay mucha gente todavía (luego se llenará . La primera decepción viene cuando tardan más de veinte minutos en tomarnos nota. A partir de este momento, nos queda claro que el problema es el servicio, porque el ritmo de cocina, luego, es bueno. Nos sacan para picar un puré de garbanzos al que, por textura, yo no llamaría humus. Tampoco está muy bueno. Dos primeros. Ensalada mixta, correcta y un risotto bueno de sabor, pero muy pasado de punto. Una verdadera pena. Dos segundos. Albóndigas, espectaculares y brocheta de langostinos y txipis, estos úntimos bien de punto, pero los langostinos otra vez muy pasados de punto. No es agradable. Los postres. Tarta fría de queso, rica también, y un tiramisú que pongo entre comillas, porque cualquier parecido con un tiramisú de verdad es pura casualidad. Está muy seco, nada cremoso. Es un mazacote difícil de comer, y muy soso. Apenas tiene el bizcocho empapado en café, sin sabor, y sobre todo, el mascarpone, que le tiene que dar cremosidad, está muy lejos de aparecer. No se si no ha sido mi día a la hora de elegir los platos (todos los defectos han estado en los míos , o que no ha sido el día de la cocina, pero desgraciadamente, comento mi experiencia aquí y hoy, y no ha sido nada buena. Tengo que decir que la espera de más de veinte minutos ha sido un borrón del servicio, pero que este ha sido bueno después, pero basándome en mi mala experiencia con la comida, ni lo recomiendo, ni volvería."
