El Patio Del Humedal

Todo, absolutamente todo, excepcional. El trato es fantástico y las comidas, con su respectiva relación calidad-precio, es inmejorable. Un sitio de 10 en el centro de Gijón, volveré!

De paso con unos amigos, paramos en la terraza, un poco justa de espacio (la acera no es amplia), pedimos vinos, buena oferta en Riojas y a buenos precios y 4 tapas. Nada que objetar, buenos precios y calidad. Volveremos a probar el comedor.

Compramos un bono de los que salen por el comercio, era barato 25€ para dos, 3 platos a compartir mas vino y postres, gratisima sorpresa al ser una buena cantidad y tambien de calidad, ademas de estar muy bien atendidos, es de los que apuntas para volver a repetir

Mi primera visita, el sitio parecía prometer... pero por un detalle no volveré. Al llegar el camarero tiene una caña preparada en la barra para otro cliente que había salido fuera, la guarda debajo de la barra. Le pido una caña y me pone la que estaba echada... Pequeños detalles que marcan la diferencia.

Estuve el domingo 26 de agosto. Reservamos y llegamos a las 13.30 y nos sirvieron la comida a las 14.15. La espera entre plato y plato se hizo insufrible. De hecho, acabamos levantándonos a pagar cuando nos hartamos de esperar a que nos cobrasen. Es una pena, porque el camarero era muy agradable. La comida más bien normalita. No repetiré

El Patio del Humedal es un local acogedor donde tomar algo o disfrutar de una comida de calidad, cierta originalidad y a buen precio. El trato es excelente y merece la pena ir. Comedor tranquilo y buen ambiente de café-copas en la zona de bar donde siempre acompañan la consumición con variedad de pinchos. Merece la pena dar una oportunidad a este joven emprendedor. Menú del día semana con entrante, dos platos, vino y postre 9,50€. Carta variada, original y con platos ricos. Muy recomendable.

El local muy acogedor y el camarero que nos atendió muy atento, pero aparte de eso la experiencia fue pésima. Y es que la comida, muy mala. Los chipirones no sabían a lo que tenían que saber y del pulpo sí que esperaba muchísimo más. He tomado pulpo siendo gallego de mil maneras, y me encanta, pero este estaba absolutamente insípido. La presentación eso sí, bastane buena, pero la cantidad normal y de sabor es que no sabía a nada (ni a pulpo). Eso junto a que tuvimos que esperar casi 45 minutos por la comida desde que la pedimos hacen que fuera una experiencia muy mala. No volveré.

Hemos ido una familia de 4 personas. Destacar el servicio, y el trato. Nos tomamos un vino en la barra antes de pasar al comedor, y ya las tapas, están muy bien presentadas, y con muy buen sabor. Nos comimos una ensalada de jamón, y otra de Ventresca.. Tanto la presentación, como la exquisitez, y sobre todo, la abundancia, hacen que te la comas con la vista. Mi hermana pidió un cachopo, que era bastante grande, y el que suscribe, un solomillo ibérico, que estaba, sencillamente, tremendo. Buena guarnición de setas..... Postre, sólo comimos uno, un maravilloso tiramisú. Relación calidad-precio, inmejorable. Para repetir, y muchas veces.....

Solemos parar mucho a tomar vinos, y el pincho que nos ponen está muy bien presentado y muy rico. Nunca nos dio por ir a comer allí, pero siempre nos picaba la curiosidad. Vimos que ofertaban un menú en oferplan por 25€... estaba todo riquísimo. Cogimos un menú para dos y una ensalada para mí, ya que el menú lo tomaban mis padres. Probé todo lo del menú: las setas que venían con el hojaldre, riquísimas, la ensalada... y EL CACHOPO, EXQUISITO. Estamos acostumbrados a un cachopo convencional, pero este rompía lo habitual, puesto que estaba enrollado. Era de jamón y queso, acompañado con unas salsas que le daban un toque idóneo. Yo, comí una ensalada que estaba buenísima y además un buen trozo...