O Furancho Da Souta

Estuvimos 20 minutos esperando para que nos atendieran y, no contentos con eso, nos tuvieron mas de una hora esperando para traer la comida.

En cuanto al servicio, es un servicio lento. La carne muy buena calidad pero el vino deja mucho que desear. Buena calidad precio. Desatacaría de este furancho la tortilla(buenísima) y la carne a la piedra.

Otras veces el servicio muy bien y la comida fantástica. Sin embargo, la última vez fue todo un desastre, una espera inaceptable, más de una hora esperando a la comida, lamentablemente tendré que dejar de venir.

Comida típica gallega, en un entorno muy gallego , con una atención muy buena. Nos atendió un camarero que supo aconsejarnos y se nosotros servicial en todo momento. La comida estaba bien los precios eran adecuados.

Un lugar difícil de encontrar pero totalmente recomendado , muy acogedor y lo más importante , buena y auténtica comida gallega, precios normales y espacio suficiente para disfrutar si el día es soleado, bueno para ir en familia con niños

Servicio pésimo y desorden total en cocina. Desde las 14.30 horas, y con reserva, nos traen la comida a las 15.47 horas. La comida no está mal pero no vale la pena la espera. En otras ocasiones tuvimos que esperar pero esta vez se han pasado. No volveremos.

Fuimos a comer con la familia,ya que mi cuñada vive en la zona y lo conocían.Todo espectacular,comida buenísima, pimientos, calamares, zamburiñas,buey,churrasco,vino buenísimo,los postres y precio buenísimo.El local está muy bien para no ser un restaurante en si.Sin duda,si tenemos l oportunidad, volveremos.

Fuimos un grupo de 9 adultos a comer y salimos muy contentos, servicio rápido, comida abundante y rica, destacable la carne que la traen cruda y se prepara a la piedra que traen a la mesa y se hace al gusto de cada uno. No le doy el excelente porque no tenían aire acondicionado y porque no admiten tarjeta de crédito para pagar.

La última vez que estuvimos fue hace varios años, y al volver ahora nos hemos llevado una grata sorpresa, pues lo han remodelado y la calidad de los productos, la cocina y el precio son muy buenos, además de la cantidad en las raciones. El servicio es muy familiar, lo normal en un furancho, pero correcto. Sus vinos caseros son bastante aceptables, tanto el blanco como el tinto. Además del comedor interior tiene terrazas exteriores bastante agradables y con el tema de la Covid-19 tienen bien guardadas las distancias y medidas de seguridad.