Borneo - Speisekarte

Muyyy bueno, raciones abundantes, buena presentación, personal muy agradable, repetimos seguro, reservad en verano!!!

Trato familiar , comida casera y excelente, de las mejores tartas de zanahoria que he probado. El timbal de rabo de toro muy correcto y el bacalao de 10.

Carta pequeña, pero cantidades abundantes y deliciosas. La atención es magnífica. Tomamos croquetas de chipirones excepcionales. Cocina casera y bien elaborada.

Veniamos de vuelta a casa y paramos en Sacedon. Comimos muy rico, rapido, bien atendidos y disfrutamos de una tarta de queso espectacular. Totalmente recomendable!

Apenas lo conozco más que de tomar una caña de aperitivo, algunas raciones. Local esmerado, correcto y agradable, raciones bien elaboradas pero... La tapa, ya habría que pesar en jubilar la albóndiga congelada, frita y con ketchup.

Amabilidad pir parte del personal y una comida deliciosa y de calidad postres de 10 (tarta de oreo blanca y negra) y un buen trabajo en equipo ,recomendamos las croquetas de chipiron,chuleton y los torrezons ,patatas bravioli ,los canelones de carillada a la traufa

Las chicas muy agradables pero tardaron casi media hora en tomar nota. Y entre otras cosas, el cachopo estaba seco y el rebozado con sabor a fritanga. La vajilla, un plato azulón tipo duralex del malo, muy pequeño y malo. En fín, quizás fuera el día pero no volveré. Tampoco es barato

El sitio se llena muchisimo, tanto a la hora de comer, como a la de cenar. Nosotros fuimos a la cena: y la carta no es muy amplia, pero esta buena. A destacar los postres caseros. El secreto iberico: imprescindible. Las unicas pegas: guarnición de patatas (para todo), y las medidas anti-covid. Las puertas abiertas de par en par con todo el mundo fumando en la calle y entrando el humo, todos los clientes entrando de la calle sin mascarilla, la distancia no era la minima, ni en terraza, ni dentro.

Estuvimos comiendo ayer. Todo de 10. Llegamos bastante tarde, casi a las 3, y no nos pusieron ningún problema por la hora. El bar estaba lleno tanto las mesas como la barra pero nos hicieron un huequito y pedimos en la barra. Tenían una terraza estupenda al sol, así que preguntamos si nos servirían allí y de nuevo ningún problema. Teníamos al perro dentro del coche y nos dijeron que podía estar con nosotros. La comida excelente, unas croquetas de chuletón y de chipirones impresionantes, unas patatas bravioli buenisimas y un timbal de rabo de toro delicioso. El chico que nos atendió en la barra y la chica que nos sirvió en la terraza lo hicieron de lujo y con una sonrisa estupenda. En definit...